El objetivo básico de una Auditoria de Certificación, también llamada de tercera parte, es verificar mediante la búsqueda de evidencias que la empresa cumple con cada todas y cada una de las clausulas de la Norma a certificar.

Para ello, entre otras tareas, se deben planificar correctamente por un Auditor debidamente competente y cualificado para su realización, comprobar registros, verificar procesos, entrevistar al personal seleccionado, emitir las Observaciones o bien No Conformidades Y Acciones Correctivas, finalizando con la cumplimentación del Informe de Auditoria que será la recomendación del Auditor a la Certificadora para la emisión del correspondiente Certificado.